Y cuantas veces habrá que decirlo?!?!?!
No tengo la respuesta, solo tengo esa sensación insoportable de impotencia...odio tanto la palabra como el sentirla...
Me cansé de salir a la calle y ver a los niños pidiendo, trabajando, drogándose, etc., etc., etc.. No era que los niños tenian que jugar??? Nos olvidamos de eso??? Acaso nosotros no jugamos???
La miseria humana ya es demasiado gigante...y algunos dicen que quienes viven en la calle viven en la miseria, o se habla de villa miseria, pero la miseria es una cualidad del hombre no de la vida!!! Creo que los miserables somos nosotros, los adultos que permitimos que esos niños, que dejan de ser niños para sobrevivir, no tengan la oportunidad de vivir la infancia...y esto suena a que hay que darselo, pero convengamos que es su derecho nada más y nada menos.
Si tuviera el dinero suficiente para poder generar proyectos que ayuden a que esos niños no vivan de esa manera, gastaría hasta el último centavo. Como no lo tengo me propuse hacer lo que puedo, de esta manera la impotencia disminuye, un poco, pero es algo. Que hago?? Verlos! Los miro a los ojos, les sonrio, les hablo, les pregunto como están, les demuestro que los considero una persona como yo, intento mostrarles que son seres, personas, humanos, les doy de alguna manera identidad.
No sé cuanto ayuda, pero es notable como cambia su actidud frente a alguien que como yo los ve en relación a la gente que no lo hace.
Una pequeña actitud puede alivianarles un poco esa carga tan pesada que les han depositado no creen? Aunque no me conformo con alivianar solamente, sé que es lo que puedo hoy, y como sé que puedo simplemente lo hago!!
Dejemos de decir con lo chicos no! y hagamos!!!
viernes, 24 de julio de 2009
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Los niños deberían ser una absoluta prioridad para cada país, provincia, ciudad, barrio, familia. Creo que los gastos que se producirían al quitarlos de las calles ya mismo, construyendo asilos para niños, sitios donde puedan vivir sin peligro, jugar, aprender y sentir cariño, es seguramente bastante inferior a los gastos que producen ahora, y especialmente cuando lleguen a mayor. Es inhumano aceptar que vivan así, por parte de los gobiernos pero mucho más aún por parte de cada habitante. El pueblo tiene el poder cuando quiere. Construir asilos y que estos asilos sean sitios agradables. Educarles, darles cariño, crear personas de aquellas pequeñeces. Pagar a educadores, alimentarles, gastar lo que sea necesario, no hay excusa. El gasto que producen es muchísimo mayor; aunque sea tan solo por el turismo que frenan, la delincuencia que provocan, los impuestos que no pagan... hasta para los más hijos de puta existen argumentos para darles una vida feliz.
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